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Invasión de abril y la aniquilación política.

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49 años del acontecimiento que marcó hasta nuestros días el panorama político de la República Dominicana y con ello la realidad de los dominicanos. El 28 de abril de 1965, desembarcaron en Santo Domingo las tropas estadounidenses para invadir la República e intervenir en el conflicto civil que buscaba la restauración de la constitucionalidad con el retorno de Juan Bosch a la presidencia luego de su derrocamiento en 1963. Esta invasión al igual que aquella de 1916 tuvo graves consecuencias para el país. La imposición de un presidente servil a los Estados Unidos y con él la instauración del terror de Estado durante doce oscuros años que fulminaron los procesos de transición democrática y transformación social que había comenzado el gobierno Bosch.  Fue culpa de esa invasión y los doce años del gobierno impuesto como fórmula de salida de las tropas estadounidenses que se aniquilaron a los jóvenes progresistas que hoy hacen tanta falta, fue esa invasión la que comenzó la...

Quisqueya la indómita y brava

En las últimas semanas, dadas las coyunturas políticas y sociales actuales he venido reflexionando sobre las letras que componen nuestro himno nacional. En este cantico glorioso se suele evocar aspectos que describen al pueblo dominicano. Una de las estrofas que más inspiran nuestro sentimiento patriótico es “ mas Quisqueya la indómita y brava siempre altiva la frente alzará. Que si fuere mil veces esclava, otras tantas ser libre sabrá ”. Respecto a esta particular estrofa me llama la atención lo distante que hoy día nosotros los quisqueyanos estamos de ser ese pueblo indómito y bravo que prefiere la destrucción de la nación antes de ser esclavos. Esto lo digo porque indudablemente dominicana está sumida en un sueño eterno. Así lo está desde la fatídica y convulsionante última década del Siglo XX. Desde entonces República Dominicana ha tenido un alto crecimiento económico sin una apropiada redistribución de las riquezas, una crisis bancaria, un retorno a una estabilidad cuesti...

A los ministros

Apenas ha transcurrido un a ñ o y unos meses desde que se cerr ó la campa ñ a electoral con m á s publicidad y derroche del erario de los ú ltimos a ñ os y de nuevo los dominicanos se ven sumergidos en cometidos proselitistas cuando falta a ú n poco menos de 2 a ñ os para la pr ó xima contienda. Esta propaganda electoral viene de dos personajes que estuvieron muy envueltos en la anterior campa ñ a del presidente Medina: Francisco Javier Garc í a y Tem í stocles Mont á s. Quienes desde el pasado gobierno de Leonel Fern á ndez fungen como ministros de turismo y de econom í a, planificaci ó n y desarrollo, respectivamente. Est á claro que los ministros pueden aspirar a la m á s alta magistratura de la naci ó n, est á n en su derecho. Ahora bien, para algunos la actual propaganda a la que est á sometida la poblaci ó n desde ya , es insensata porque de acuerdo a muchos, se resolvi ó que las elecciones municipales y congresuales sean conjuntamente con las presidenciales para darle ...

Minutos de odio

El lunes pasado en el Parque Independencia se celebró una manifestación de apoyo a la sentencia No.168/13 dictada por el Tribunal Constitucional y en la que hubo una considerable concurrencia de ciudadanos. A raíz de la referida sentencia, en los medios de comunicación hay un fuerte debate respecto a lo que algunos consideran un acto patriótico y reafirmador de la soberanía nacional y otros (incluyéndome) ven en este acto jurisdiccional una vulneración latente de varios derechos fundamentales y de diversas disposiciones constitucionales. Este debate es propio de cualquier Estado que se considere mínimamente democrático, toda vez que la democracia apela al disentimiento; pero dentro de cauces legítimos. Tanto aquellos que expresan su disconformidad con la sentencia No.168/13 como los que entienden que es una decisión de acuerdo a la Constitución tienen el Derecho de expresarse libremente, de congregarse y manifestarse. Ahora bien, ni los que disienten ni los que apoyan la sentencia...

Dos cuestiones y varias conclusiones

I.-El “problema haitiano” y la explotación. Desde hace décadas se viene pronunciando una parte de la sociedad acerca de la inmigración ilegal de haitianos hacia la República Dominicana y ésta lo ha catalogado como un problema: e l problema haitiano . Esto no resulta ser fruto del azar. Es una verdad producto de un discurso imbuido por prejuicios y xenofobia selectiva que esconde un mundo de privilegios que solo son posibles creando un “problema” que necesita soluciones radicales para la posteridad de la patria . Digo que es una verdad puesto que la retórica del discurso viene desde las élites que interpretan la historia conforme a los intereses de esa casta rancia de la oligarquía dominicana. Hablar del problema haitiano es hacer un paralelismo con el problema judío de los nazis y por tanto, de pronto, nos conllevaría a la solución final del problema haitiano. Y es que esta solución final es la total exclusión tanto de los nacionales haitianos residentes ilegalmente en el país...

Procedimiento administrativo: un avance institucional

Hace apenas unas semanas el Poder Ejecutivo promulgó la Ley No.107-13 sobre los derechos y deberes de las personas en relación a la Administración Pública y el procedimiento administrativo. Esta reciente ley que entrará en total vigor dentro de 18 meses a partir de su promulgación constituye un sustancial avance en el fortalecimiento del marco institucional que fiscaliza y controla las actuaciones de la Administración Pública. Por procedimiento administrativo debemos entender como el conjunto de actos formalizados que conducen la actuación administrativa hasta la toma de una decisión [1] . En palabras más llanas, el procedimiento administrativo es aquel proceso que tiene que cumplir la Administración para manifestar su voluntad a través de un acto formal. De ahí que con esta ley se están introduciendo unos cambios viscerales en el ordenamiento administrativo del país toda vez que con ella se persigue de forma radical y definitiva cercar el ámbito de discrecionalidad que tienen...

Un debate más serio sobre educación

Después de varios años de reclamos y manifestaciones por parte de las diversas organizaciones de la sociedad civil, el año pasado se logró finalmente que el gobierno y el Congreso Nacional cumplieran con la Ley General de Educación, Ley 66-97, e incluyeran el 4% del PIB en la partida presupuestaria correspondiente a educación.  Sin embargo, a la fecha la ejecución del presupuesto previsto solo se ha realizado en un 38.5% y existen altas posibilidades de que no ejecute su totalidad. Esto tiene como consecuencia que aunque el 4% se encuentre asignado en el presupuesto, al final como no se ejecuta en al menos un 90%, la eficacia pretendida con la asignación es imposible. Quizás la razón de esto se deba a que el gobierno cuando finalmente acató la Ley General de Educación intentó acallar las voces de quienes reclaman una educación pública gratuita y de calidad, pero realmente no ha sido así y entiendo que estamos en el momento idóneo para fomentar un debate serio sobre educación. ...