A modo de introducción: Estrellado en el ser por el deber ser.
Una buena introducción para cualquier tipo de escrito es siempre muy difícil de escribir. Tal vez, incluso es la parte más difícil de cualquier escrito ya que la idea principal de lo que se quiere plasmar está en el desarrollo y no en la introducción. En un blog, así como en casi todos los escritos, una introducción sirve para entender el nombre del sitio y para saber de qué tratará. A modo de introducción, escribí el siguiente relato.
El relato: Estrellado en el ser por el deber ser-
A partir mi período de alta adolescencia[1] y pienso que hasta hoy, siempre he tenido un cierto sentido crítico con las cuestiones cotidianas -desde la manera en que se corta un pan tradicionalmente a cuestiones más complejas como las leyes del tránsito y las normas consuetudinarias de la conducción vehicular dominicana- y me he planteado interrogantes que algunas han encontrado respuestas y otras siguen sin contestarse, como cualquier otra persona.
Ahora bien, a partir de esa etapa de mi vida, me he sentido consternado por las relaciones sociales, las normas, costumbres, la política politiquera y el manejo del Estado del país donde habito. Posiblemente, fue esta preocupación social y constante crítica lo que me llevó a enrolarme en la escuela de derecho porque a través del Derecho pensé que era posible entender mejor el modus operandi de Dominicana y ciertamente, me ha ayudado a comprender un poco; pero también me ha incitado a formularme aún más preguntas, a ahogarme en los sofismas que se despliegan en todo el andamiaje social que constituye a Quisqueya.
Mientras estuve en la universidad, pienso que mejoré ciertos puntos hacia donde dirigir mis interrogantes y obtener las respuestas que deseaba. Durante este período, es muy probable que sintiera mis primeras frustraciones para con la sociedad en que vivo y el aparato Estatal. En mis años universitarios, aprendí a saborear la impotencia ante las cotidianas injusticias. El Derecho te enseña el “deber ser” para que uno se impacte con el duro “ser”.
De forma que, en la universidad no hice más que conocer el deber ser y chocarme con el ser. Mi mente estaba bien ocupada, estaba entretenida conociendo el deber ser y colisionando con el ser para luego reclamar que este fuera más como el deber ser. No había más que un debate deontológico y ontológico sin rigor y constante de la realidad política, jurídica, cultural y socio-económica de la República Dominicana.
Sin embargo, ahora que estoy recién graduado me he quedado más con el ser que con el deber ser. Ya no me es necesario chocar con el ser, puesto que creo que he aprendido, al menos, lo mínimo para vivir irreparablemente estrellado en él. El deber ser, del que aún me suplo, funciona para vigorizar mis ideas y sustentar mejor los reclamos por más un deber ser y menos un ser; pero a la vez el deber ser me aplasta aún más en el ser.
Se trata, más bien, de una lucha interna cotidiana contra el adormecimiento social que vivimos, de una batalla contra el pensamiento corruptor que se divisa en los actos más sencillos de nuestras relaciones sociales, de una búsqueda incesante a la lógica de las normas jurídicas y los actos de poder del día a día. Es toda una experiencia bélica dirigida contra las incongruencias de las clases sociales dominicanas, toda una guerra contra los que nos dicen los profesores de Derecho Constitucional y los funcionarios.
Ahora bien, por tratarse esto de un post introductorio, no es sensato aburrirlos con una publicación larga y sosa sobre cómo nació Absurda Quisqueya. Por esa razón, me veo ante la obligación de continuarles el relato en otro post. Mientras tanto, siéntanse bienvenidos a este espacio que por ahora promete ser un amplio lugar para expresar las ideas y denunciar todo aquello carente de sentido y que se pasea diariamente delante de nuestros ojos.
[1]Cuando me refiero a “alta adolescencia”, hago alusión a la época en que tenía 13 o 14 años. Divido mi adolescencia, como los historiadores suelen dividir a la Edad Media: Alta y baja.
Espero con ansias los próximos escritos! :)
ResponderEliminaresperamos con ansias :)
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